No es ningún secreto que Lewis Hamilton tiene ambiciones profesionales completamente ajenas a los circuitos de la Fórmula 1. El piloto ha demostrado sus aspiraciones artísticas a lo largo de los años grabando música como puro hobby, aunque también colaboró con Christina Aguilera en su canción ‘Pipe’, y hace unos días volvió a repetir que su futuro está en el mundo del cine y la moda cuando se retire definitivamente de las carreras.
En ese caso, no sería mala idea que comenzara a aceptar papeles de un peso cada vez mayor para seguir ampliando su experiencia, que por ahora se reduce a un par de cameos y a su trabajo como actor de doblaje en la franquicia de animación ‘Cars’. Hace años, mucho antes de que se anunciara la secuela de ‘Top Gun’, estuvo atosigando a Tom Cruise para que le tuviera en cuenta durante el proceso de casting. De hecho, si no quedaba más remedio, estaba dispuesto a trabajar como conserje.
Tom le puso en contacto con el director Joseph Kosinski, que le ofreció un papel en cuanto la película entró en el proceso de preproducción. Sin embargo, el piloto lo rechazó diciéndose a sí mismo que le sería imposible compaginar el rodaje con su apretada agenda de carreras. Aunque la cruda realidad es que le pudo el miedo.
«En primer lugar, ni siquiera había recibido una clase de interpretación», se ha defendido Lewis. «Y no quiero ser el que no esté a la altura en una película como esa. Y en segundo lugar, no tenía tiempo para dedicarle. Recuerdo que tuve que decírselo a Joe y Tom, y se me rompió el corazón».
La gran pregunta es si se arrepintió, y sí, lo hizo: «Claro que sí, cuando me enseñaron la película. Me dije: ‘¡Podría haber sido yo!’. Dios, todavía no me lo creo…».