Matthew Perry «nunca habría creído» lo mucho que le querían sus fans.
El actor de ‘Friends’ falleció hace un año por los efectos agudos de la ketamina y su padrastro Keith Morrison ha contado cómo la estrella sintió que «había fracasado» en los años anteriores a su muerte debido a las fotografías poco halagadoras que circularon.
El presentador de ‘Dateline’ dijo a la revista PEOPLE: «Hubo un periodo en el que tomabas un tabloide y veías una foto de un actor con sobrepeso que no tenía buen aspecto, caminando por la calle o yendo a un restaurante. Y él, creo, sintió que había fracasado. No entendía que era alguien a quien querían, nunca se lo habría creído».
El actor de ’17 otra vez’ se mostró sorprendido por la reacción a sus memorias de 2022, ‘Friends, Lovers and the Big Terrible Thing’, en las que hablaba con franqueza de su batalla contra la adicción.
Keith dijo: «Volvió de la gira del libro y todavía se estaba pellizcando, diciendo: ‘No puedo creer que parezca que le gusto a la gente'».
El presentador de 77 años cree que una de las razones por las que Matthew fue tan franco en el libro fue por hacer otro intento de superar sus problemas.
Keith explicó: «Fue brutal, y él parecía estar en un punto en el que por fin lo había superado. Creo que, en cierto modo, lo incluyó en el libro con la esperanza de superarlo. Tal vez si lo digo en público, si lo digo en un libro, si me lo recuerdan todo el tiempo, tal vez pueda tener éxito. Lo puso todo ahí fuera».
Keith -que está casado con la madre de Matthew, Suzanne Morrison- admitió que el actor le dijo a su familia que no se «sorprendieran» si moría como consecuencia de sus problemas.
Indicó: «Matthew nos dijo, y lo dijo públicamente: ‘Si muero de repente puede que los sorprenda, pero probablemente no sea así’. Es una enfermedad que afecta a un gran número de personas».