Salma Hayek dice que su mayor logro en la vida es ver a su hija crecer y ser independiente

Salma Hayek ha asegurado que su mayor logro en la vida ha sido ver a su hija crecer y ser independiente.

La actriz, de 58 años, ha criado a su hija Valentina, de 18 años, con su marido, el Consejero Delegado de Kering, Francois-Henri Pinault, pero además es madrastra de los tres hijos de su cónyuge, François, Mathilde y Augustin, de relaciones anteriores.

La madre de François y Mathilde es la primera esposa de Pinault, Dorothée Lepère, mientras que la de Augustin es la supermodelo Linda Evangelista.

Salma insistió en que verlos crecer y convertirse en jóvenes adultos ha hecho que las decisiones tomadas en su carrera -en la que tuvo que rechazar muchos papeles para poder ser una madre presente- para hacer de su familia su «prioridad» han valido la pena.

En declaraciones a la publicación italiana IO Donna, indicó: «Todos mis hijos, no sólo Valentina, son ahora independientes y estoy feliz por ello. He invertido mucho tiempo en ello. Mi familia siempre ha sido una prioridad. Se puede ver en mi carrera, en los últimos 18 años sólo he elegido papeles rodados sobre todo en verano y en Europa. No he tenido que sacrificar nada, sólo organizarme mejor».

Salma dispone ahora de más tiempo para trabajar ahora que su hija tiene 18 años y está tan motivada como siempre para seguir creando nuevos programas y películas para el público latino a través de su propia productora independiente Ventanarosa, que proporcionó a los espectadores la exitosa serie ‘Betty la fea’.

Dijo: «Soy consciente de que aún queda mucho por hacer. La certeza de que cada historia que cuento, cada proyecto que realizo, puede marcar la diferencia para otra persona. No me interesa dar a conocer lo que hago por los demás, sino simplemente hacerlo. El cambio no necesita publicidad, necesita acción. Esto siempre me ha guiado en la vida. Básicamente trabajo día y noche. Durante el día doy entrevistas, hago rodajes o tengo diversas reuniones con las fundaciones con las que colaboro; por la noche estoy encerrada en la oficina con mi productora porque al otro lado del océano es de día. Nuestro último proyecto es una adaptación televisiva de la popular novela de 1989, ‘Como agua para chocolate’, de Laura Esquivel: hemos tardado seis años en terminarla y, si tenemos en cuenta que hay 600 millones de hispanohablantes en el mundo, es fácil ver el potencial».