El virus H5N1 de la gripe aviar, con una alta tasa de mortalidad en seres humanos aunque con una tasa de contagio por ahora limitada, se está expandiendo rápidamente a continentes como el americano debido a factores como el cambio climático, destacó una experta de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«El cambio climático ha impactado en las rutas de las aves migratorias, y esto ha jugado un papel en la expansión sin precedentes del H5N1 en animales», subrayó en rueda de prensa la jefa del programa de prevención global de la gripe de la OMS, Zhang Wenqing.
La experta recalcó que la variante 2.3.4.4b del virus «emergió en 2020, cruzó el Atlántico en 2021 hasta Norteamérica y en 2022 llegó a Sudamérica», observándose en los últimos años diversos brotes no solo en aves, sino también en mamíferos.
La reciente detección de brotes de gripe aviar en ganado vacuno y caprino en Estados Unidos, que ha causado en una granja el primer contagio de vaca a hombre nunca antes registrado, ha aumentado la preocupación de la comunidad médica por las posibles mutaciones de este virus, que según la OMS tiene potencial epidémico y pandémico.
La jefa de enfermedades emergentes y zoonosis de la OMS, María Van Kerkhove, agregó que desde 2021 solo se han detectado 28 casos de gripe aviar en humanos, pero el aumento de los brotes en animales ha llevado a la agencia sanitaria a mantener desde hace siete años un sistema de vigilancia global, así como programas de desarrollo de posibles vacunas.
«Aunque no hay por ahora transmisión entre humanos nos preocupa el virus, porque sabemos que la gripe tiene potencial para causar epidemias y pandemias, es por eso que mantenemos el sistema», remarcó la también responsable de la respuesta de la OMS contra la covid-19.
La semana pasada la OMS afirmó que el virus H5N1 se ha encontrado también en leche de ganado vacuno y caprino infectado por los brotes en Estados Unidos, por lo que insistió en el mantenimiento de prácticas de seguridad alimentaria tales como el consumo exclusivo de productos lácteos pasteurizados.
Frente a millones de pájaros infectados y fallecidos en las últimas dos décadas por H5N1, los casos en humanos siguen siendo raros (unos 900 desde 2003), aunque preocupa el alto nivel de letalidad que por ahora tiene la enfermedad en el hombre, ya que más de la mitad de los contagios han sido mortales para el paciente.
La OMS reconoce un «crecimiento exponencial» desde 2020 en el número de infecciones en pájaros, además de cada vez más mamíferos afectados, entre ellos focas, visones, leones marinos, zorros y desde las últimas semanas también ganado vacuno y caprino.