El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este viernes 9 de agosto que, tras dos semanas de la detención de Ismael «Mayo» Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo del «Chapo» Guzmán, «no hay cooperación» del gobierno de Estados Unidos para informar sobre el caso.
«No hay cooperación del Gobierno de Estados Unidos en este caso, es decir, no nos han dado información suficiente», criticó durante su conferencia de prensa matutina.
El gobernante mexicano insistió en que las autoridades estadounidenses no han entregado información suficiente sobre el arresto de ambos narcotraficantes, ocurrido el pasado 25 de julio en El Paso, Texas.
Desde la detención, México ha solicitado en diversas ocasiones a las autoridades estadounidenses información sobre los hechos, en los que, insistió López Obrador, no participaron las Fuerzas Armadas mexicanas.
El Presidente reconoció, sin embargo, que EU ha entregado información, aunque ha sido «muy elemental, muy general», respecto al avión que llegó a El Paso, que Washington tenía un acuerdo tiempo atrás con Guzmán López y que sabía que en la aeronave no solo iba el hijo del «Chapo», sino también Zambada.
«No ha habido más, solo (que había) un avión clonado, sabemos que no salió de Hermosillo (Sonora) porque la Fiscalía de México está haciendo la investigación que corresponde», precisó.
Sin embargo, dijo que hace falta aclarar, por ejemplo, qué pasó con el piloto que manejaba la aeronave, qué hicieron con él y desde dónde salió el avión.
«Y queremos saber más sobre la negociación, si fue un acuerdo o, como llegó a declarar el abogado del señor Zambada de que lo habían detenido, entonces saber bien todo esto», afirmó.
También dijo que espera que se aclare si el acuerdo entre Estados Unidos solo fue con Guzmán López o también con Zambada, y si intervino alguna agencia extranjera, pues, insistió, ni el Gobierno de México ni las Fuerzas Armadas participaron en el arresto.
Tras su detención, el «Mayo» Zambada se declaró no culpable a través de su abogado de los 14 delitos imputados, que incluyen cargos por narcotráfico y lavado de dinero, y provienen de una acusación presentada en 2012.
El cofundador del Cártel de Sinaloa quedó detenido tras bajar de una aeronave que lo llevó hasta Estados Unidos sin que el narcotraficante tuviera conocimiento de ello, acompañado por uno de los hijos del «Chapo» Guzmán, antiguo socio de Zambada.
El jueves de la semana pasada, compareció para una audiencia procedimental en El Paso en la que solo habló una vez y fue para decir «sí», en respuesta a una pregunta de la jueza sobre posibles «conflictos de intereses» de su representación legal.